PUBLICADO POR DAVID
TRUEBA
¿Quién le teme a la entrevista? ¿Por qué tanto pánico en
televisión a este formato que pervive como el más clásico, limpio e
imperecedero contenido del medio? Está bajo sospecha la entrevista. Tanto que a
Julia Otero, que posee el don de hacer hablar a quien tiene enfrente sin
apropiaciones del tiempo ni censura preventiva sobre la personalidad que quiera
mostrar, le han envuelto su espacio de entrevistas con elementos que disimulen
que en esencia es una conversación. Una pantalla magnífica que no cesa de
arrojar imágenes de archivo, preguntas grabadas de otros personajes al invitado
y una música constante que más que envolver delata el miedo al vacío, cuando el
mayor vacío es el relleno.
Julia Otero pelea por la entrevista pura y ojalá la sostengan
invitados con palabra. No todos sus invitados dan para eso, pero a veces la
confianza en la palabra regala la mejor televisión.